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Historia del simbolo, bandera gay

2 de septiembre de 2008


La bandera gay, a veces denominada bandera de la libertad, ha sido utilizada como símbolo del orgullo gay y lésbico desde la década de los '70. Los diferentes colores simbolizan la diversidad en la comunidad gay y sus colores son utilizados a menudo en marchas por reclamos. Nació en los Estados Unidos, pero ahora es utilizada en todo el mundo.
La bandera de arco iris fue popularizada como símbolo del orgullo gay por el artista nacido en San Francisco, Gilbert Baker, en 1978. Actualmente consiste de seis franjas de colores rojo, naranja, amarillo, verde, azul y violeta. La bandera copia el orden de los colores como en los arco iris.
Había banderas similares en los Estados Unidos en los primeros años de la década del '70, usados como símbolo de unidad internacional de toda la gente del planeta, pero a fines de esa década, la relación popular de esos colores con el orgullo gay comenzó a dominar.
La bandera original fue diseñada por Gilbert Baker. Flameó por primera vez en el Festival del Orgullo de San Francisco, el 25 de junio de 1978.
Consistía de ocho colores, cada uno con sus significados:
Rosa: sexualidad
Rojo: vida
Naranja: curación
Amarillo: luz del Sol
Verde: naturaleza
Turquesa: magia
Azul: serenidad
Violeta: espíritu
Es la bandera que identifica a la comunidad LGTB.
Gentileza de Karina Bitti, socia de ASHA

Joaquín y Daniel, la primera pareja sorda gay que contrae matrimonio en España

27 de mayo de 2008

En el pueblo de Mataró (Barcelona) se celebró por primera vez en España la ceremonia civil de matrimonio de una pareja gay sorda.

Se llaman Joaquín y Daniel y el día de su boda estaban muy ilusionados. Son los dos primeros sordos gays que se han casado en España. A la ceremonia acudieron familiares y amigos que quisieron acompañar a esta pareja en este día tan emotivo. Esta es la primera vez en España que una pareja de sordos gays se ha casado. Ocurrió en Mataró (Barcelona) a principios de septiembre y fue un enlace muy especial. Los novios estuvieron acompañados por sus familias, sus amigos y también destacados miembros de la comunidad sorda y del colectivo de discapacitados de Mataró. Joaquín y Daniel estaban ilusionados, pero también algo nerviosos. Para ellos lo importante no es que fuesen la primera pareja gay que se casaba, sino que era el día que habían estado esperando mucho tiempo, porque por fin podían estar juntos como un matrimonio.